Las durezas normalmente salen en zonas de presión o fricción del calzado o entre los huesos del pie y el calzado o incluso entre los propios huesos.

Se llaman hiperqueratosis porque es un acúmulo excesivo de queratinocitos muertos en el estrato córneo de la epidermis (capa superficial). Comúnmente se denominan “callos”.

Por eso cuando acudimos al podólogo y nos retira las durezas con el bisturí, no sentimos dolor.

 

¿Cómo saber si tengo hiperqueratosis?

Tendrás la piel más dura, más áspera, con mayor sequedad y suelen tender a un color amarillento; pero no suelen dar dolor. Pero ¿y si a mi me duele la dureza?

Deberías acudir a un podólogo para que te haga un diagnóstico diferencial, ya que podría ser un papiloma o un heloma.

 

¿Qué es un papiloma?

Es una infección vírica, producida por el virus del papiloma humano, que al pellizco en la zona de la dureza si duele.

 

¿Qué es un heloma?

Son hiperqueratosis más localizadas con bordes mas definidos que profundizan a capas más internas de la piel. Normalmente sí son dolorosos.

 

¿Cómo tratar un heroma?

Acuda a su podólogo de confianza una vez al mes o cada dos meses según necesidad para retirar las durezas (superficiales) o helomas (profundos).

Una vez en consulta el podólogo valorará si es necesario realizar un estudio de la pisada para mejorar esta o si fuera necesaria una intervención quirúrgica (por ejemplo, en helomas interdigitales)

 

¿Cómo prevenirlo?

1. Lleve calzado cómodo y ancho con materiales de calidad (evite plásticos).

2. Hidrate a diario el pie con cremas específicas con urea al 10% o 20%.

3. Acuda a la consulta del podólogo para realizarse un estudio de la pisada.

4. Acuda con frecuencia a su podólogo.

 

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